Desde casi niño, sintió la pasión por el arte y se aficionó al dibujo , y posteriormente, siendo muy joven ingresó en el taller de cerámica de Vicente Abad donde aprendió ávidamente las técnicas cerámicas y se formó como pintor de azulejos, paneles, platos… Continuó su formación en Granada y también en Mallorca.
Con 23 años Vicent Aguilella se instaló en su propio taller en la calle Vila-Real. En 1991 Ingresó como profesor de pintura ¡en la recién refundada Escuela Municipal de Cerámica de Onda y posteriormente, en 2004,en la Escuela de Cerámica del nuevo Museo del Azulejo hasta su fallecimiento en 2006.
En 1994, junto con Francisco García Gisbert, abrió la tienda-taller Ceràmica Artesans, en la Avenida del País Valencià que continua en la actualidad.
Podemos ver en su obra la influencia de los grandes pintores como Velázquez, Rubens, Goya y Sorolla. Tenemos que destacar la perfección del dibujo y el absoluto dominio de los matices, de los claroscuros, las veladuras y las carnaciones. En sus obras con plumilla podemos admirar la pureza del trazo y la exactitud de la pincelada, sin rectificaciones ni correcciones. Se caracterizan por un realismo naturalista que raramente sobrepasó para llevar a cabo innovaciones que nunca le interesaron. Reproducciones de iconografía devocional, bodegones y paisajes, los más típicos rincones ondenses (el Castillo, la Font de Dins, El Salvador, el Portal de Sant Pere,) y los retratos, faceta donde obtuvo excelentes resultados. Destacar también las magníficas escenas mitológicas que pintó para su amigo Vicente Palau Hurtado de Alboraya. Su trabajo se desarrolló prácticamente por encargo.
Participó en diversas exposiciones colectivas en “La Saleta” Municipal y en las salas de la Caja Rural de Onda. Sus obrasestán presentes en el ámbito privado ( en el cual es abundantísimo) y en numerosos lugares públicos de la Península (Onda, Castellón, Xilxes, Valencia, Barcelona o Madrid). En Onda merecen citarse las espléndidas copias de los paneles devocionales decimonónicos de El Salvador y la Samaritana (1990, Ermitorio de El Salvador) o La Sagrada Familia (1980, Calle Santa Ana). Otra gran parte de su obra se encuentra diseminadas por el extranjero, destacando algunos lugares como La Habana, Holanda o Rusia. De hecho, por medio de la empresa Cobsa, para la que trabajó asiduamente, sus obras han sido difundidas a muchos rincones del mundo.
Vicent Estall i Poles . Director del Museo